Y LOS BARBOS POBLARON LAS ORILLAS

Hace menos de un mes, en los ríos de Extremadura se podía contemplar el espectáculo del remonte de los barbos en freza, un manto de escamas de colores marrones y cobrizos tapizaban el cauce de los ríos abriendo las puertas a una nueva generación de este fantástico pez.


Pasado este tiempo y con algunos de sus congéneres todavía en la parte alta de los ríos, los barbos están volviendo a su vida habitual y con la afluencia de insectos se encuentran merodeando las orillas en busca de su alimento.

La pasada semana he podido comprobar la actividad de estos ciprinidos acercándome a uno de los embalses que frecuento y en el que pude verificar que se encontraban muy activos, pero a diferencia de lo que esperaba se alimentaban en los fondos realizando grandes carreras y normalmente en grupos (imagino que estarían alimentándose de alevines).

Me gusta la pesca con mosca seca incluso sabiendo que las capturas serán menores pero se me eriza la piel cada vez que uno de estos submarinos asoma su boca por encima del agua y pausadamente enguye la mosca para luego dar un coletazo y comenzar a correr.

La verdad es que, incluso habiendo gran población de barbos, estos se encontraban recelosos, huían con facilidad y no presentaban interés por las moscas secas, sólo una posada perfecta y a pocos centímetros de su boca permitían que alguno de ellos sucumbiera al engaño, e incluso después de esto la inmensa mayoría de ellos la escupián sin tiempo a realizar el clavado del anzuelo.

Con estas condiciones y con más rechaces que capturas, conseguí engañar a tres de estos peces que después de la foto de rigor volvieron a recorrer las orillas en busca de su alimento.

La mosca que mejores resultados dió fue un escarabajo de foam con un penaño naranja para aumentar su visibilidad ya que los lanzamientos eran todos por encima de los 15 metros y no es fácil ver una mosca negra en el agua oscura de este embalse.


El próximo finde lo volveremos a intentar, a ver si a nuestros exquisitos compañeros les gusta más el menú.

6 comentarios:

David Romanillos dijo...

¡Ciprinidos a mosca ..., siempre!
Saludos.

Carlos Del Rey. dijo...

Me pasó lo mismo el otro día, pero pude solucionarlo con ninfa.
Por cierto se está poniendo el agua verde.

Zumbio dijo...

Sí Carlos, el agua está cada día con más verdín, hay que buscar las playas en las cuales no de el aire de frente.

Como he comentado es que no me gusta pescar a ninfa y a parte ver una ninfa a unos 15 metros me resulta imposible jajajajaja.

Por eso, aunque con menos capturas seguí pescando a seca y me pude divertir un poco.

Un saludo a ambos.

Raul Duque dijo...

Y los barbos poblaron las orillas...

A MEN!

Como estan los embalses españoles... Que maravilla, barbos listos y huidizos, pero activos y "arriba", la combinación más excitante para el verdadero pescador a mosca de ciprinídos.

Aquí encontramos las dotes de acecho, sigilo, puntería y saber hacer, nervios de acero y pulso de cirujano.

Felicidades Jaime, un abrazo!

César Tardío dijo...

Felicidades Jaime,parece que los barbos por fin dieron la cara,respecto a ese tipo de escarabajo te diré que lo utilizo mucho en Alcántara y con unos resultados muy buenos.
Un saludo

Zumbio dijo...

Gracias a Ambos,
a ver cuando compartimos esa jornada de pesca que tenemos a medias.

Una saludo y buena pesca.